Joven, innovador y a la vez un apasionado por el surfing del pasado, Ryan Burch es un free surfer y shaper nativo de California, capaz de surfear en toda clase de olas, ya sea sobre extensos tablones, tablas cortas o asimétricas, con inmenso estilo, precisión y fluidez. Cada vez que lo vemos en un video es puro deleite visual.
Un joven que sabe cómo extraer el máximo provecho en cada momento y más allá de las condiciones del mar, exhibiendo un gran despliegue igual en una ola pequeña y mediocre. Cada video de Ryan Burch es una clase maestra de equilibrio, surcando olas en todas las direcciones, trazando desde diagonales imposibles a increíbles cambios de ritmo.
Se lo ve hacer proa sobre un longboard o danzar sobre olas en una tabla corta, siempre bajo la misma determinación, como si estuviera poseído en un trance de perfección técnica, improvisación y pleno goce.
Hace unos meses The Inertia destacaba un reciente video de Ryan Burch en los siguientes términos:
“The Rush of the Continuous Rhythm vuelve a sugerirnos que el futuro del surf para todos nosotros no se encuentra en la WSL ni en las maniobras técnicas, sino en volver a concebir las olas como un lienzo vacío, que espera ser creativamente dibujado… El futuro del surf se puede encontrar en su pasado, regresando a las razones por las que los seres humanos comenzaron a hacer surf en primer lugar: Es divertido…”
Precisamente, gracias a ese respeto natural por el pasado y un novedoso estilo, el free surfer australiano Harrison Roach ha expresado su terrible admiración por Ryan Burch, a quien considera una verdadera fuente de inspiración:
“Las personas que me inspiran son los que hacen referencia a estilos vintage de una manera contemporánea; toman lo mejor del pasado y lo combinan con el presente, creando algo nuevo. Ryan Burch es una de esas personas. Tiene un talento extravagante en el agua y está en contacto con todas las épocas de diseño de tablas de surf. Está construyendo y montando las tablas cortas más futuristas que he visto en mi vida, así como los longboards más clásicos que jamás he visto. Me saca de quicio”.
Las imágenes en movimiento hablan por sí solas:
